La revelación


Blas López-Angulo  //   
 
Así, la vida social, en todos sus aspectos y en todos los momentos de su historia, solo es posible gracias a un vasto simbolismo” (Emile Durkheim)

En 1993 fue encontrada en la necrópolis de Numancia el ejemplar más completo de una fíbula, compuesta por el caballo y el jinete. Se trata de una pieza metálica que era utilizada para unir o sujetar todo tipo de prendas que componían la vestimenta de un individuo. Desde la Edad del Bronce forma parte de los elementos de adorno personal de íberos, griegos, romanos y bizantinos. Con los visigodos conseguiría una importancia simbólica superior al usarse junto a otros accesorios como perlas o vidrio. El caballo es un símbolo de poder, de estatus, en este caso se relaciona sin ningún lugar a dudas con la aparición de una élite social basado en un sistema clientelar que permite un mayor control del territorio (Sánchez-Moreno, arqueólogo e historiador).

Los japoneses tenían un problema con el vestuario tradicional del básico kosode —una bata en forma de letra T de uso cotidiano— y el más complejo y elegante kimono: ninguna de ambas prendas cuenta con bolsillos para almacenar pequeños objetos como el tabaco o simples monedas. La solución vino dada por los netsuke, colgantes que se sujetaban a las fajas anchas de las vestimentas para poder atar contenedores o bolsas trenzadas, de tela o de piel. Como tantos otros útiles en la exquisita artesanía japonesa, mudaron en piezas de artesanía de asombroso acabado e imaginativas formas.

El netsuke se convirtió en un adorno que aparecía tanto en los trajes de samuráis como en los vestidos de los ciudadanos ricos de Japón en el siglo XVIII. Los artesanos de dos ciudades, Osaka y Kyoto, se disputaban la categoría de contar con los mejores maestros de la época. Un delicado jabalí durmiente es uno de los netsukes de los talladores más populares de ambas urbes, Satake Soshichi. Es de madera tallada con una precisión de detalle pasmosa dada su dimensión (55 milímetros).

En la segunda mitad del XIX, el adminículo conquistó los corazones de los coleccionistas europeos. 264 netsukes fueron a parar a un miembro del clan de los Ephrussi, una familia judía de origen ruso que hizo fortuna comerciando con el trigo ucraniano y que disputó a los Rothschild la supremacía económica de su gente. De todos los avatares de esta particular colección nos da cuenta un gran ceramista llamado Edmund de Wall, último descendiente de los Ephrussi, en un fascinante libro “La liebre con ojos de ámbar”.

Estas figuritas japonesas son tratadas bajo el molde de la sensibilidad de su heredero, nos dice el crítico, “como ángeles caídos del cielo sobre los encantos y las miserias de la Europa contemporánea”.

El descubrimiento de los propios orígenes, a través de la investigación sobre los netsuke o las fíbulas, trascienden a sí mismo como objetos, incluso a la historia que llevan inscritas en sus páginas. Según señala el Equipo Arqueológico de Numancia el hallazgo del Caballito, así como la vasija de otras excavaciones, destaca a Numancia por su singularidad creativa, bien atestiguada por la peculiaridad no sólo de sus cerámicas, sino también, según vamos conociendo un mayor número de objetos, por las producciones en bronce. En este sentido, no deja de ser peculiar que las dos fíbulas, de las que no se conocen paralelos en otro sitio, pertenezcan al yacimiento de Garray.

De la importancia del capital simbólico aprendimos del gran sociólogo bearnés, Pierre Bourdieu. Y antes de Max Weber, que el poder se basa en las creencias carismáticas a menudo tomadas como revelación, como epifanía religiosa; en la convicción emotiva de la importancia y del valor poseídos por una manifestación de los dones mágicos o de cualquier otra clase, de algo tan pequeño como la fíbula de un Caballito.

Numancia y toda Soria, ciudad y provincia, eternamente unidas, se disponen a encontrar el camino más bello -pero también eficaz- para soñar no con grandeza, sino con la sensatez de partir desde las pequeñas cosas para alcanzar mayores metas. Va en su legado, va en su historia.

 

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