Niños de entre 10 y 15 años, de 22 escuelas, han vivido una experiencia mágica en el mundo circense de la Ópera en Familia
La ópera se representa para el público general los días 29 y 30 de abril
Esta mañana, 1.520 niños de entre 10 y 15 años de 22 escuelas e IES han disfrutado de Los cuentos de Hoffmann, de Jacques Offenbach, actividad del Cabildo de Tenerife, a través del proyecto Ópera en Familia de Ópera de Tenerife, que tiene el apoyo del Gobierno de Canarias. Los escolares que han asistido a la función eran de centros de Santa Cruz de Tenerife, Tegueste, Puerto de la Cruz, Güímar, Granadilla de Abona, Arona, San Cristóbal de La Laguna, Tacoronte, Los Realejos, La Esperanza, Icod de los Vinos y La Laguna.
El director insular de Cultura, José Luis Rivero, que asistió a la representación escolar que además sirvió de ensayo general, recordó que “acciones como esta se enmarcan dentro de la estrategia Tenerife 2030 con la que el Cabildo pretende formar y capacitar a los más pequeños de cara al futuro”.
La ópera está protagonizada por el tenor David Astorga, en el rol de Hoffmann, pero el elenco se completa con Guiomar Cantó (Antonia y Giulietta), Inés Ballesteros (Olympia), Beatriz Lanza (Nicklausse), Néstor Galván (Spalanzani/Pitichinaccio/
La dirección de escena es de Raúl Vázquez y está ambientada en el circo. Se trata de una apuesta muy atractiva para toda la familia, que se representará en la Sala Sinfónica del Auditorio de Tenerife Adán Martín el sábado 29 a las 18:00 horas y el domingo 30 a las 12:00 horas. Todo bajo la dirección del maestro Rubén Díez.
Auditorio de Tenerife ha demostrado siempre una vocación de trabajo para el desarrollo de audiencias jóvenes y de sensibilización general hacia todos los procesos de la cultura. Ópera en Familia es un proyecto de adaptación de los títulos principales del repertorio operístico internacional a un público que se acerca por primera vez a disfrutar de la experiencia operística, y que lo hace en familia, donde adultos y niños comparten esta experiencia y la enriquecen con sus diferentes puntos de vista sobre el mismo hecho escénico. Es una forma de compartir, dentro de la Temporada de Ópera, una actividad común que, lejos de separarse del gusto de los niños, se amolda a su forma de afrontar los procesos culturales, con una visión propia y un esfuerzo intelectual ajustado a sus edades, pero del que también pueden participar los adultos para enriquecer y complementar, al tiempo que para disfrutar como los niños.
La intención es transmitir la ópera como un arte vivo, lleno de posibilidades, que reúne la escena, la música y el canto en propuestas comprensibles para todos los niños y niñas, y al mismo tiempo divertidas para que les resulte una experiencia atractiva.
