ARCO abre sus puertas del 24 al 28 de febrero con importantes cambios


Con la presencia de las más destacadas galerías que a lo largo de 35 años han participado en la feria internacional de arte contemporáneo ARCO, la edición que abrirá sus puertas del 24 al 28 de febrero será «única, excepcional e irrepetible».

La celebración de este aniversario ha llevado a Carlos Urroz, director del certamen, a organizar una cita diferente en la que el lugar que durante las dos últimas décadas ha ocupado un país invitado se ha sustituido por un programa en el que participarán 35 de las más destacadas galerías que durante estos años han visitado la feria.

Seleccionadas por las directoras del programa María y Lorena del Corral y por los comisarios Catalina Lozano y Aaron Moulton, será la primera vez que muchas de estas galerías coincidan en Madrid «y puede que no lo vuelvan a hacer nunca», ha comentado Urroz durante una entrevista con Efe.

Nombres como Fortes Vilasa de Sao Paulo, Ruth Benzacar, de Buenos Aires, Marian Goodman o Lisson de Londres han sido importantes en la historia de ARCO además de ser muy destacadas en el panorama del arte contemporáneo.

«La selección de artistas que traerán es muy interesante, con una mezcla de creadores jóvenes y otros muy cotizados. Va a merecer la pena visitar ARCO que tendrá unos contenidos excepcionales que ya están atrayendo a coleccionistas internacionales y directores de museos y de bienales. Va a haber de todo, desde pintura fantástica hasta performances muy sorprendentes», ha referido.

Muy satisfecho con la respuesta de las galerías convocadas para participar en este programa, «ninguna ha dicho que no, salvo una que le coincide con la apertura de otra sede», Carlos Urroz considera que los otros programas de la feria «también van a ser especiales».

Así, a Opening, dedicado a las galerías más jóvenes, este año se incorpora el comisario Juan Canela, de Barcelona. «Esta sección habitualmente ha estado más centrada en Europa pero este año habrá más galerías de Estados Unidos y de países latinoamericanos como Puerto Rico, México, o Argentina, que acudirán con un máximo de tres artistas».

Otro programa ya tradicional en ARCO es el de SoloProjets «que este año está orientado a dos temas. El primero de ellos tratará sobre el humor como resistencia política, que es un tema que desgraciadamente ha sido muy importante en latinoamérica, y el segundo es el mundo del teatro, de la escena, la performance y su influencia en el arte contemporáneo».

Esta sección tematizada «hará que un artista tenga relación con otro, algo que no pasa en otras ferias. Es muy interesante y contamos, no solo con artistas jóvenes, sino que hay de todas las edades, alguno de ellos ya fallecido como el argentino Alberto Greco que vivió durante muchos años en España».

En lo que respecta al Programa General, participarán 169 galerías de diferentes países «entre ellas algunas que hacía muchos años que no venían, como las parisinas Thaddaeus Ropac y 1900-2000 con obras de artistas del siglo XX, así como Denise René, que vino el primer año de ARCO y que trajo a artistas cinéticos latinoamericanos, españoles y franceses».

Un total de 35 galerías de las que participan en el Programa General lo harán con la propuesta Solo/Duo que les permite dedicar se espacio a uno o dos artistas. «Muchas de las galerías van a varias ferias y en ARCO les interesa hacer algo diferente y apostar por alguno de sus artistas. El año pasado funcionó muy bien y en esta edición hemos tenido 70 peticiones».

Otra propuesta que hace de ARCO una feria diferente es la presencia de directores de museos, de bienales y de críticos de todo el mundo, así como el programa dirigido a los coleccionistas.

«En él hacemos mucho esfuerzo, vendrán como unos 150 como el año pasado. Además, hemos incorporado otro programa dirigido a grupos nuevos como el de jóvenes coleccionistas o el de asesores que compran para terceras personas. Buscamos grupos que generen negocio en la feria», detalla.

En cuanto a sus previsiones de negocio, Urroz, que ya ha recibido varios compromisos de compra, apunta que además de que el mercado ha mejorado, «hay mayor confianza y los coleccionistas han ido saliendo de una timidez. Cuanto más confianza tenga la gente en el futuro, más capacidad tiene de comprar una cosa que no necesita como es una obra de arte».

En estas compras sigue siendo fundamental el IVA Cultural. Urroz apuesta por «un IVA reducido y homogéneo en la Comunidad Económica Europea», pero reconoce que hasta que no haya un nuevo Gobierno «con unos interlocutores a los que se pueda plantear cuestiones como esta, no podemos hacer nada». Mila Trenas

Si continúa navegando, acepta nuestra política de cookies    Más información
Privacidad