El Auditorio de Tenerife y la Obra Social «la Caixa» ofrecen un nuevo concierto participativo de El Mesías, de Händel


Más de 200 personas participarán este miércoles [día 21] en este concierto que tendrá lugar en la Sala Sinfónica y que estará dirigido por Paul McCreesh

El Auditorio de Tenerife "Adán Martín" acoge en la Sala Sinfónica el miércoles [día 21], a las 20:30 horas, el concierto participativo de El Mesías, de Händel, bajo la dirección de Paul McCreesh. Los conciertos participativos de la Obra Social "la Caixa" ofrecen una experiencia única que reúne a cantantes aficionados a la música coral con orquestas, solistas y directores de reconocido prestigio. Este año participarán más de doscientas personas de todas las edades y profesiones que, agrupados por voces, cantarán las partes corales de la obra desde las localidades asignadas en el Auditorio de Tenerife "Adán Martín".

El concierto de este año contará con la participación de Gabrieli Consort & Players, de Mary Bevan (soprano), Tim Mead (contratenor), Thomas Walter (tenor), David Stout (bajo), la Coral Reyes Bartlet, la Coral Universitaria de La Laguna, el Coro Carpe Diem, el Coro de la Escuela Municipal de Música y Danza Villa de La Orotava, el Coro Juvenil David Goldsmith y el Coro Polifónico de la Universidad de La Laguna

Las entradas para asistir a El Mesías se pueden adquirir a través de los canales habituales: telefónicamente, en el 902 317 327, y en las taquillas del propio Auditorio (de 10:00 a 15:00 horas, de lunes a viernes, y de 10:00 a 14:00 horas los sábados) y a través de internet en www.auditoriodetenerife.com<http://www.auditoriodetenerife.com/>.

Considerada una de las obras más célebres de la toda la historia de la música, El Mesías -oratorio compuesto por Georg Friedrich Handel (Halle, 1685- Londres, 1759)- aborda la vida de Cristo y su misión salvadora. Compuesta en 1741 y estrenada un año después en Dublín, esta obra cima del oratorio barroco fue creada por Handel tras recibir en 1714 una invitación del lord teniente de Irlanda, solicitandole su ayuda para recaudar dinero para las tres instituciones benéficas más importantes de Dublín gracias a las interpretaciones de su música.

Aunque Handel por aquel entonces no se econtraba bien de salud, estaba decidido a crear un nuevo oratorio sacro para la ocasión y consultó a Charles Jennens, su libretista de Saúl y de Israel en Egipto, un tema apropiado y este le confió una colección de versículos del Antiguo y el Nuevo Testamento. Como resultado de ello, nació este oratorio, cuyo texto inicialmente generó cierta controversia. El autor hizo varias revisiones posteriores de la obra y, pese a que la obra sigue siendo una eterna favorita del repertorio barroco, en la actualidad sus representaciones, especialmente en época de Navidad, incluyen solo la primera parte y el coro del aleluya de la segunda.

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