La cita, que se pasa en versión original con subtítulos en español, promete ser un regalo para la mirada de los canarios, que verán la naturaleza de su tierra retratada como nunca. El director austríaco Michael Schlamberger ha pasado los dos últimos años rodando por las islas en compañía de uno de nuestros mejores documentalistas: Pedro Felipe Acosta. Con cámaras y equipamiento de última generación, el equipo de rodaje recorrió la tierra, el mar y el aire del archipiélago, y registró comportamientos e hitos de las distintas especies.
Con este documental se aprende cómo las corrientes marinas, el viento y el clima interactúan con las distintas especies para crear el singular ecosistema de las islas. Una naturaleza cercana, pero muchas veces desconocida, plasmada a través de la mirada de uno de los directores de documentales más prestigiosos de la escena internacional.
La charla-debate posterior al pase, en la que participan Juan Carlos Rando y Pedro Felipe Acosta, tendrá un formato diferente al convencional. En un ambiente relajado y distendido, los invitados y los asistentes discutirán sobre diferentes temas de interés científico vinculados al documental proyectado. Se trata de una oportunidad para disfrutar del cine y la ciencia, a la que vez que los asistentes comparten con expertos y amigos conocimientos y experiencias, a través de la palabra.
Juan Carlos Rando es biólogo especialista en conservación del medio ambiente. A lo largo de su carrera profesional ha desarrollado investigaciones en campos tan diversos como la genética, la paleontología o la conservación. En los últimos años, ha enfocado sus investigaciones en el estudio de los vertebrados extintos de Macaronesia, cuestión esencial para calibrar los impactos y cambios en la biodiversidad de las islas a raíz de las colonizaciones humanas durante los últimos dos milenios. En sus trabajos de conservación destacan las iniciativas llevadas a cabo con los lagartos gigantes de Canarias o con especies exóticas invasoras, entre las que se encuentran algunos animales tan conocidos como las ratas y los gatos. Actualmente, es miembro de la asociación Abeque, con la que participa activamente para trata de frenar la expansión en el macizo de Teno de otra peligrosa especie invasora, esta vez vegetal: el rabo de gato.
Por su parte, Pedro Felipe Acosta, director de documentales medioambientales. Se crió en una familia humilde de Los Realejos y, desde pequeño, mostró interés por explorar la naturaleza. A los 16 años le regalaron una cámara de fotos y comenzó su afición por plasmar la biodiversidad. A los 21 emigró a Inglaterra, donde compró su primera cámara de cine y aprendió el arte del rodaje. De vuelta a casa, se aplicó a la exploración de los espacios naturales para capturar imágenes de las especies salvajes de su entorno. Pedro Felipe es conocido por su perseverancia. Su técnica consiste en preparar minuciosamente escondites con mucha antelación para que los animales no sospechen y, desde allí, esperar pacientemente la ocasión para filmarlos sin que la presencia humana altere su comportamiento.
Hace algunos años, su equipo descubrió en Teno una especie que se creía extinta: una «canariella», un tipo de caracol terrestre que solo se conocía por restos fósiles. En otra ocasión, filmaron una criatura recién descubierta por la ciencia, un insecto cavernícola de Gran Canaria. Así, ha rodado más de una docena de películas documentales, entre ellas, títulos como Chinijo (2002) o Teno, hombre y naturaleza (2006). En 2014, recibió el Gran Premio del Festival del Cine del Pájaro y la Naturaleza (Festival de l’Oiseau et de la Nature) por Canarias a la sombra de los volcanes, un documental que llegó a proyectarse en lugares tan lejanos como Polonia o China.