- La también fotógrafa navarra acompaña, en su debut como realizadora, el cotidiano de los últimos años de sus abuelas, María Jesús y Manolita
- El Festival de Cine presenta este documental dentro del apartado Panorama España, este lunes 12 a las 19:30 horas y mañana martes 13 a las 17:15 horas en Cinesa El Muelle.
Un retrato íntimo y profundo de la edad madura a través de las historias de dos mujeres octogenarias. Este es el resultado y el reflejo del proceso de búsqueda que Ione Ateneo consigue plasmar en Enero (2019), ópera pima de la joven realizadora navarra que se podrá ver en la vigésima edición del Festival de Cine de Las Palmas de Gran Canaria, dentro del apartado Panorama España, este lunes 12 a las 19:30 horas y mañana martes 13 a las 17:15 horas en Cinesa El Muelle.
En Enero, María Jesús y Manolita, las dos abuelas octogenarias de la cineasta, son retratadas en sus rutinas cotidianas. En su debut como realizadora, la también fotógrafa Ione Atenea acompaña el cotidiano de los últimos años de sus abuelas. A través de un montaje orgánico sigue sus rutinas diarias y cotidianas. Mientras la cámara refleja los gestos y la materialidad de los cuerpos que envejecen, la voz de la directora tras la cámara las interpela sobre sus vidas, el paso del tiempo y la muerte, cuya cercanía impregna toda la película.
Ione Atenea, en un encuentro mantenido la mañana de este lunes con la prensa, explicó que la película surgió a partir de las conversaciones que mantenía con sus abuelas en la cocina sobre los momentos históricos que habían vivido. A partir de sus relatos personales, dijo, fue explorando esa época y comenzó a sentir que se estaba produciendo “una transmisión de conocimientos e historia”, por lo que decidió recoger todos estos relatos con la cámara.
Atraída por el contraste entre las personalidades y las vidas de las abuelas, reconoció que “abarcaban muchos aspectos de una generación de mujeres que quería explorar ya que siempre se las ha mantenido a la sombra y en segundo plano, y son personas que han vivido mucho y tienen mucho que contar y sabiduría que transmitir”.
En cuanto al rodaje, dijo, es una película “sencilla e íntima que sólo pedía que estuviese ella ya que el foco estaba puesto en la relación abuela nieta”. Quería afrontar el trabajo “de una manera amateur y poner en valor lo sencillo y cotidiano de estas personas que aparentemente no son importantes, pero que la figura que representan realmente hace que sí lo sean”.
Ione Atenea habló de los momentos de conversación que mantiene con las dos mujeres en los que surgen reflexiones muy profundas, la materialidad de los cuerpos que envejecen, de los gestos, los silencios… Un envejecimiento, sostuvo, que contrasta con su vitalidad, pese al ritmo “a veces pausado de la película”. Todo esto despertó en ella la búsqueda de los aspectos positivos y vitales de la vejez y recogerlos en Enero.
En esta reflexión sobre el paso del tiempo que se estrenó en 2019 en el Festival Internacional de Cine de Gijón, ganando el premio del público a la mejor ópera prima europea del certamen, también refleja el proceso de búsqueda personal de la realizadora. “Comencé a grabar por unos deseos e intuiciones de algo que quería recoger y quise que eso se evidenciara en el montaje”. Esta búsqueda que realiza fijándose en lo cotidiano de estas mujeres, en sus cuerpos, en sus gestos, en sus ritos cotidianos se filmó durante dos años, hasta que decidió parar y seleccionar con su hermana Marina, productora de la película, todo ese legado. Un material, admitió, “que es un regalo”, tanto el que se ve en la película como el que se ha descartado. El programa completo del Festival de Cine está disponible en la web oficial lpafilmfestival.com y las entradas se encuentran a la venta a través de los canales entrees.es para la programación de Miller (Camera Obscura, Tarde más freak y alguna sesión especial relacionada con el aniversario del centenario del cineasta francés Chris Marker) y en la plataforma de Cinesa, cinesa.es, que oferta el resto del programa, a excepción de Déjà vu, que podrá verse en el Museo Elder de la Ciencia y la Tecnología, espacio que acoge también el mercado MECAS.