Su proyecto, ‘Duelo por la España negra’, puede verse en TEA Tenerife Espacio de las Artes hasta el próximo 15 de marzo
La artista visual Lola Lasurt (Barcelona, 1983) muestra en TEA Tenerife Espacio de las Artes, dentro de la decimoquinta edición de Fotonoviembre, Duelo por la España negra, un proyecto que se basa en la recreación del viaje que el pintor asturiano Darío de Regoyos hizo junto al poeta belga Emile Verhaeren en 1888, primero por distintos enclaves guipuzcoanos, para discurrir luego por la entonces llamada España seca. “Este trabajo ofrece una forma distinta de sentir y vivir las imágenes. Se trata de un trabajo filmado en super-8 y proyectado a través de un juego de reflejos con el que la luz hace rebotar las imágenes en el espacio”, detalla Lasurt sobre su propuesta, una de las cinco que conforman la sección Artistas en Selección de esta bienal. Duelo por la España negra puede verse en este centro de arte contemporáneo del Cabildo hasta el 15 de marzo de 2020, de martes a domingo de 10:00 a 20:00 horas.
La creadora explica que Regoyos animó a cruzar los Pirineos al poeta belga en un momento de duelo compartido y que el libro La España negra recoge las notas redactadas por el poeta a modo de crónica de viaje, ilustradas por el pintor con una serie de grabados. “La España negra surgió en sus orígenes del cruce de dos miradas, la española y la belga, la propia y la ajena. No tanto de su memoria verdadera como de sus fantasmas, asumiéndolos como propios, así como para reivindicarlos como para exorcizarlos”, subraya Lasurt que en su trabajo artístico recrea aquel viaje.
Explica que Duelo por la España negra se basa en la documentación de su propio paso en 2018 por los mismos lugares donde pintor y poeta pararon durante su trayecto. “Por esto busqué que su formalización en el espacio fuera de alguna manera también experiencial para el espectador. Es decir, que se aproximara al documento fílmico de una manera distinta, esperando, por ejemplo, que su vista se acostumbre a la oscuridad. Y es que, Regoyos y Verhaeren visitaron todos los pueblos durante la noche, entre tinieblas. El proyecto también se puede entender como una anti-guía turística”.
Además de ello, Lola Lasurt reconoce que en este caso entiende su modo de filmar “como una secuencia de fotografías en movimiento”, ya que usó el botón de disparo de la cámara super-8 como si fuera el de una cámara de fotografiar. Su proyección se realiza sobre planchas de zinc, tradicionalmente usadas para la técnica del aguafuerte, lo que hace que “la imagen en movimiento rebote ampliada sobre el espacio y las personas en él, creando un juego de reflejos y miradas junto a la propia del espectador”.
Por otra parte indica que cuando Regoyos y Verhaeren emprendieron su viaje era “el momento idóneo para poner una estética al pesimismo generalizado que estaba instalado en la sociedad española de finales del siglo XIX” y que a ella le interesaba “mostrar una revisión de ese fenómeno histórico y artístico desde el punto de vista de la psicología, tanto la individual como la colectiva”.
Formar parte de esta bienal -reconoce la artista- le ha permitido repensar su práctica artística dando hincapié en su modo de aproximarse al documento histórico, ya sea el que se encuentra como el que recrea en relación a la actualidad. Destaca por otra parte que “Fotonoviembre es un proyecto fantástico de alto nivel, con valores consagrados y un espacio para el riesgo y la experimentación, muy bien gestionado a nivel profesional por parte de toda la organización de TEA y del equipo curatorial”.
Lola Lasurt es licenciada en Bellas Artes por la Universidad de Barcelona, con un posgrado en Estética y Teoría del Arte por a la UAB. Entre 2013 y 2014, formó parte del Programa Post-Académico en Investigación Artística HISK, con un estudio en la ciudad de Gante (Bélgica), siendo nominada al Young Belgian Art Prize en 2015, organizado por la Jeune Peinture Belge y BOZAR, Bruselas. Con su trabajo analiza paradigmas de cambio en relación a lo social, lo político, así como también dentro del mismo mundo del arte. Trabaja aspectos del destiempo esquivando la doctrina histórica como una empresa abierta y auto-crítica. Actualmente, realiza un postgrado en Filosofía del Arte en la Escuela de Arte y Humanidades del Royal College of Art de Londres.
En 2018 recibió el tercer premio de la Mostra de Arte Naturgy (MAC, La Coruña) por su proyecto El partido y formó parte de Generación’18 (Fundación Montemadrid/La Casa Encendida, Madrid). El 2017 recibió el Premio Guasch Coranty de la Fundación Ciudad de Valls por A Visit to the CP Nel Museum with Mo. El mismo año también recibió la beca para la formación y el perfeccionamiento en el ámbito de las artes en extranjero del Departamento de Cultura de la Generalitat de Catalunya que le permitió matricularse en el RCA. En 2015, consiguió el Premio Miquel Casablancas con su proyecto Ninguno (Sant Andreu Contemporani, Barcelona).
Ha realizado residencias artísticas en Bélgica, Italia, Argentina, Holanda, Sudáfrica y España. Entre sus exposiciones individuales destacan Emisión Periódica Definitiva (Santcorneliart, Cardedeu, Barcelona, 2017), Donación (Barcelona Gallery Weekend/Biblioteca Pública Arus, 2016), Ejercicio de Ritmo (Galería Joan Prats, 2015), Promenade (Besme 105, Bruselas, 2015), Doble autorización (Espai13, Fundació Joan Miró, 2014) y Amnesias (Espai2, Sala Moncunill, 2012). Está representada por la Galería Joan Prats, Barcelona.
Fotonoviembre, bienal cuya misión principal es la de posibilitar y difundir una amplia reflexión en torno a la imagen como medio de expresión, comunicación y participación cultural, descubre la mirada y el talento de más de 200 artistas de una veintena de países a través de veintidós exposiciones que se pueden ver en nueve municipios de la Isla. El festival se estructura en base a cuatro secciones: Oficial, Artistas en Selección, Atlántica Colectivas y Focus.