- El día 23 de abril, con motivo del Día Mundial del Libro, participarán en la conexión con Madrid desde Gran Canaria, Antonio Morales, Guacimara Medina, Alicia Llarena y Pedro Flores
La Biblioteca Insular del Cabildo de Gran Canariavolverá a sumarse por séptima ocasión consecutiva el día 23 de abril, con motivo del Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor, a la iniciativa de la lectura ininterrumpida de El Quijote, que desde hace 25 años organiza el madrileño Círculo de Bellas Artes.
Si ya de por sí el mencionado evento que pretende recordar la vigencia y la dimensión de esta obra cumbre de la literatura universal escrita por Cervantes hace cuatro siglos se caracteriza por su alta ascendencia virtual, por segundo año consecutivo lo será aún más debido a las limitaciones de aforo y protocolos de seguridad que impone la pandemia. No habrá, por tanto, como el pasado año, lecturas presenciales desde el salón de actos de la entidad madrileña, y todas las personas que se han alistado a esta peculiar revisión en voz alta de ‘El Quijote’ lo harán de forma telemática por videoconferencia desde sus hogares y centros de trabajo, repartidos por numerosos lugares del mundo.
En esta edición se rendirá un homenaje a la cultura, tan sacudida con la situación sanitaria. Escritores, músicos, actores y responsables de la gestión cultural, estarán presentes durante toda la lectura.
El poeta Francisco Brines, Premio Cervantes 2020, será el encargado de inaugurar la Lectura, a la que se sumará desde Gran Canaria, el presidente del Cabildo, Antonio Morales, la consejera de Cultura, Guacimara Medina, y los escritores Alicia Llarena y Pedro Flores. El acto se retransmitirá a través de la página web del Círculo de Bellas Artes www.circulobellasartes.com
Conexiones telefónicas y videoconferencias en directo y pregrabadas se llevarán a cabo desde Alemania, Bélgica, Brasil, Cabo Verde, China, Corea del Sur, Cuba, El Salvador, Estados Unidos, Filipinas, Francia, Guinea Ecuatorial, Italia, Japón, México, Panamá, Paraguay, República Checa, Rumanía y Sudán, así como desde numerosos puntos de España. De esta manera, esta lectura vuelve un año más a situarse como uno de los focos internacionales más importantes en torno al Día del Libro.
También en la lectura intervendrán autoridades políticas como José Manuel Rodríguez Uribes, Isabel Díaz Ayuso, Nadia Calviño, Miquel Iceta, Isabel Celaá o Arancha González Laya, entre otros. Asimismo, intervendrán personas relevantes en el mundo de la cultura como la cantante y compositora Rozalén; los periodistas Fernando Íñiguez, José Miguel López y Fernando Lara; la cineasta Ángeles González Sinde, y numerosos escritores como Rosa Montero, José María Merino, Julia Navarro, Pilar Quintana, Ana Punset, Ana Morató, Raquel Díaz Reguera, Carla Montero, Vanessa Montfort, entre otros.
Lamentablemente este año la Biblioteca Insular no podrá instalar la pantalla que habitualmente ocupa este día su vestíbulo y desde la que se sigue durante el transcurso de dos jornadas la lectura continuada de ‘El Quijote’, cuya traducción alcanza 200 variedades lingüísticas y 150 idiomas a los que se ha traducido (total o parcialmente).
Del caballero andante de Cervantes, de Sancho y de Rocinante, se conocen versiones en Esperanto, braille —17 volúmenes de 31 centímetros de alto y 120 páginas cada uno— y hasta en T9, tal como se llamaba el código de escritura que se usaba en los ya casi extintos SMS de móvil. Versiones, todas, inimaginables cuando en 1612 Thomas Shelton, al traducirlo al inglés, lo llevó por primera vez a una lengua extranjera.
El clásico de Cervantes, autor del que se celebró recientemente el cuarto centenario de su desaparición, es una de las obras cumbre de la literatura universal. Con su modernidad perenne, este texto configura un completo universo de categorías literarias, en el contexto de una España que extendía su autoridad con la cruz y la espada en la parte del Nuevo Mundo que le había otorgado por el Tratado de Tordesilllas. ‘El Quijote’ ilustra en grado superlativo los rasgos fundamentales de la condición humana y la dimensión constitutivamente narrativa de la vida.
¿Pero por qué o para qué escribió Cervantes ‘El Quijote’? El pretexto narrativo —desterrar la lectura de los libros de caballerías— no parece suficiente móvil para obra tan trabajada. Y en efecto: el verdadero interés de Cervantes fue reivindicar la posibilidad de una obra de entretenimiento que al tiempo fuera moralmente sostenible. Los humanistas habían atacado los libros de caballerías por falsos e inmorales, pero el problema era que las otras lecturas “permitidas”, de Cicerón a Apuleyo, no podían competir con ellos por el favor del público. La solución de Cervantes fue crear una obra irreprochable y además amena y divertida.