• Guillermo Perdomo, director de la Casa-Museo Tomás Morales, será el guía de la nueva cita de ‘Miradas a la Colección’, este martes, 30 de enero, a las 19.00 horas, con entrada libre hasta completar aforo
Las Palmas de Gran Canaria, 29 de enero de 2017.- Los difusos límites de una urbe en auge abrazada por el mar y el campo marcaron las coordenadas artísticas y vitales del pintor Francisco Suárez León (Las Palmas de Gran Canaria, 1865-1934), uno de los grandes exponentes del realismo en Canarias. Su cuadro ‘Paisaje costero de Las Palmas de Gran Canaria’ centra la próxima cita de ‘Miradas a la Colección’ de la Casa de Colón, que sumerge esta vez al público en una obra rebosante de luces e historias.
En esta ocasión, el encargado de timonear esta mirada particular bajo el título de ‘La ciudad que mira al Atlántico’ será Guillermo Perdomo, director a su vez de la Casa-Museo Tomás Morales, en Moya, otro de los centros de la red museística del Cabildo de Gran Canaria gestionados a través de su Consejería de Cultura. El acto tendrá lugar este martes, 30 de enero, a partir de las 19.00 horas, con entrada libre hasta completar aforo.
Este singular óleo está fechado entre los años 1902 y 1905, es decir, en los comienzos de una etapa definida como el periodo áureo por los conocedores de la obra de Suárez León, una fase de su creación que se prolongaría durante una década.
La Casa de Colón le dedicó en 2003 una exposición antológica a Suárez León que se llamó ‘Pintor de la realidad’, comisariada por Jonathan Allen. Además, en la muestra ‘El paisaje en la colección de la Casa de Colón’ se exhibieron cinco de sus obras para subrayar un legado artístico definido “por una leve aura poética en el tratamiento del paisaje”.
Con Francisco Suárez León, coetáneo del poeta Tomás Morales, se inició una saga artística a la que dieron continuidad su hijo Cirilo y su nieto Tony, tres generaciones de arte grancanario con sello propio.
En la formación artística de Suárez León como artista es obligado mencionar la influencia ejercida por Rafael Bello O’Shanahan y por Nicolás Massieu y Falcón. No obstante, su forma de afrontar la pintura dio un golpe de timón de la mano del maestro catalán Eliseu Meifrén, quien fijó su residencia en la isla en 1899 tras una invitación del presidente del Gabinete Literario de Las Palmas de Gran Canaria, Eusebio Navarro Ruiz.
Esta mirada actual a ‘La ciudad que mira al Atlántica’ traslada a la orilla del presente a un pintor que en 1900 expuso en las Fiestas del Rosario de Las Palmas de Gran Canaria junto a artistas de su generación, caso de Massieu y Matos, Isidoro González o Federico Valido.