O.M. Domínguez explora la alquimia musical con ‘Elementos’


  • El rapero canario que combina la música urbana con instrumentos como el timple, la guitarra o el saxofón se viste de nuevos ritmos alejado de la solemnidad de sus trabajos anteriores

De la tierra que pisa, el fuego que purifica, el agua que limpia y el aire que respira saca el poeta y cantante canario O.M. Domínguez la inspiración para presentar su nuevo trabajo, ‘Elementos’, un recorrido por nuevos sonidos que apuesta por la frescura y la música festiva frente a la solemnidad de sus anteriores propuestas artísticas.

Se trata del primer trabajo discográfico del artista desde 2020, fecha en que publicó ‘Libre’. Desde entonces, aunque ha publicado temas con regularidad, como ‘Flores’ (2022) o ‘Familia (2023), O.M. Domínguez se ha centrado principalmente en crear una propuesta de directo madura y trabajada, para la cual propone dos formatos, tanto con una potente banda de funk y jazz que incluye a Armando Drive (guitarra eléctrica y secuenciador), Derque Martín (timple), Leo Segovia (bajo eléctrico), Alan Imar (saxofón), Kilian Barrera (bateria) y Sara Bolaños (coros), como en formato más íntimo, junto a Armando Drive y Derque Martín.

Con el E.P. ‘Elementos’, Domínguez apuesta por las radiofórmulas y los circuitos comerciales aunque no renuncia a la lírica que caracteriza a sus letras ni descarta los temas con mensaje. Se trata, como bien expresa el autor, de un experimento personal, una forma de abrirse a otros estilos e influencias, pero no de un viraje completo que lo aleje de la intensidad y la profundidad de sus letras en un viaje sin retorno.

El primero de los temas de esta nueva entrega es ‘Tierra’ -ya disponible en las principales plataformas digitales- una canción compuesta junto al productor catalán Maken Row que bebe de los ritmos cubanos y que cuenta con la colaboración de Lázaro Sandoval y Yoel Díaz a los coros y Aitor Hernández al saxofón.

Con un estilo heredero de las músicas urbanas que lo vieron crecer pero abierto a la influencia de nuevos sonidos, el trabajo de O.M. Domínguez no se apoya necesariamente en bases de rap convencionales sino que se nutre de otras melodías e instrumentos como el timple, la guitarra clásica o el saxofón, lo que le lleva a combinar estilos y géneros en apariencia irreconciliables pero que, pasados por el tamiz de su creatividad, se hermanan en una propuesta artística sólida y con personalidad propia.

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