La excavación arqueológica aflora un suelo de ocupación con diverso y abundante material arqueológico que muestra una gran actividad humana

El proyecto de investigación del yacimiento Lomo los Melones, en Telde, Gran Canaria, promovido por la Dirección General de Patrimonio Cultural, esta aflorando nuevas aportaciones para conocer y recuperar este conjunto arqueológico como espacio de investigación. Así se pudo comprobar en la visita realizada por Miguel Ángel Clavijo, titular del área, acompañado por Héctor Suárez, director general de Infraestructura Turística; y la concejala del Ayuntamiento de Telde, Gloria Cabrera

Tras 18 años de la última excavación, empiezan a aflorar los muros de una nueva estructura que hablan de la importancia arqueológica y científica que hasta el momento se está documentando en Lomo los Melones. Los trabajos desarrollados en el yacimiento se están centrando en la excavación del interior de la vivienda denominada E2, donde se ha encontrado un suelo de ocupación preparado, con presencia de abundante materiales arqueológicos de diferente naturaleza: huesos de animales, herramientas de piedra, moluscos, pescados y un nuevo descamador realizado sobre un cuerno de cabra, semejante a lo ya documentado en la campaña de 2004. Además, se han encontrado hasta 6 focos de combustión (fuegos) que nos muestran una gran actividad humana prolongada en el tiempo.

Asimismo, en la vivienda E3, se está retirando la arena y tierra superficiales acumuladas tras 18 años de la última excavación, «donde empiezan a asomar los muros de una estructura que aún hay que determinar si es de origen prehispánico o posterior a la conquista» apunta Abel Galindo, director de Arkeós Arqueología.

En el transcurso de este recorrido, el director general de Patrimonio Cultural, Miguel Ángel Clavijo, destacó «la apuesta de su Departamento por la investigación, siendo la intervención arqueológica de Lomo los Melones un claro ejemplo para el avance del conocimiento de los antiguos pobladores de la isla de Gran Canaria».

Por su parte, Héctor Suárez, responsable de Infraestructura Turística del Gobierno de Canarias, destacó el trabajo de coordinación de ambas áreas de la Consejería de Turismo, Cultura y Deportes, calificando está intervención de «acertada» y, añadió que, «cuando preguntan a los turistas en encuestas qué es lo que requieren para completar su visita, nos manifiestan que desean conocer más del destino, integrarse con la población, saber de dónde venimos y cuáles eran nuestras manifestaciones del pasado» Descubrir el patrimonio arqueológico en un municipio como Telde, que no es fundamentalmente turístico, permite que los visitantes no permanezcan donde se alojan, sino que se muevan por toda la isla redistribuyendo la economía que generan».

Gloria Cabrera, concejala de Patrimonio Histórico de Telde, explicó que, «el municipio está de enhorabuena porque se ha visibilizado su patrimonio arqueológico a sus vecinos y vecinas, y se ha atendido una petición del Ayuntamiento al Gobierno de Canarias, logrando una respuesta que como se puede comprobar hoy ha valido la pena».

La relevancia científica arqueológica es sin dud

a el punto fuerte de este pequeño espacio habitacional prehispánico, ya que los restos arqueológicos muebles (cuernos de cabra, el gran volumen de restos de pescados y fauna terrestre, el ritual de fundación de la vivienda, el record en número de semillas de higo), han permitido dar a conocer algunos aspectos y herramientas de esta rica cultura prehispánica, que hasta ese momento eran desconocidos. La actual conservación de suelos de ocupación dentro de la E2 y la posibilidad de conservarse en la E3, aún sin excavar, puede aportar más información de la ya conocida. También hay una amplia zona de la parcela donde no se ha realizado ninguna intervención arqueológica, por lo que se desconoce la superficie total que aún se conserva del conjunto arqueológico y de la potencialidad arqueológica original.

Los restos arqueológicos existentes sufren actualmente de una fuerte degradación debido a su ubicación dentro de un populoso núcleo urbano, como es la playa de La Garita, que afecta directamente a los restos arqueológicos.

En Lomo los Melones, desde el año 1998, se han venido realizando sucesivas intervenciones arqueológicas, estudios que han dejado a la luz lo que queda de un poblado costero de origen prehispánico. En los primeros estudios arqueológicos con sondeos se descubrieron diferentes construcciones, entre viviendas, muros y un horno de cal. Actualmente este conjunto arqueológico conserva el record de semillas de higos encontradas en un solo contexto doméstico.

El conjunto y los materiales arqueológicos recuperados ha sido objeto de múltiples estudios para la realización de artículos, tesis doctorales y memorias de proyectos de fin de grado. Todos estos aspectos dejan claro la importancia arqueológica científica que hasta el momento está aflorando en Lomo los Melones.