El Festival CERO cumple en 2021 su quinta entrega, consolidado ya como uno de los principales eventos para mostrar las tendencias de la música indie y alternativa a nivel nacional, y como un escaparate señalado para evaluar el trabajo de las formaciones canarias en esta línea. Después de un 2020 atípico, en donde el certamen se reconvirtió en Pista CERO para cumplir con las condiciones que la pandemia ha permitido a la Cultura, el festival vuelve en 2021 al Espacio Miller, en el Parque Santa Catalina. Será del 11 al 17 de octubre, y en la agenda se reserva un hueco especial para varios conciertos acústicos de artistas isleños. Entre ellos, el de Said Muti: uno de los nombres indispensables para comprender la evolución del Rock en las Islas en los últimos años.
Muti se presentará ante el público en el formato más descarnado, y también el más auténtico: voz, guitarra y piano para repasar su repertorio. Esto es, lo ya editado en el EP Corazones y Ceniceros (2013), dos discos de estudio (De Tripas Rock ‘N’ Roll, de 2016, y Habitación 828, de 2018) y un disco en directo (En Directo desde el Auditorio Alfredo Kraus, de 2018). La pandemia cortó la evolución discográfica de un músico versátil y sin complejos a la hora de abrir la puerta al Rock, su género, a otras influencias.
“El acústico es lo que hay: ni trampa ni cartón”, subraya Muti, que avanza que también tirará “de alguna nueva canción” para la propuesta que prepara con vistas al próximo CERO. También apunta que “si una canción no se puede tocar con piano, guitarra y voz a lo mejor es que no es digna de ser grabada. Si es buena, lo interesante es que la semilla del tema esté presente”.
Lo que tiene claro el artista es que “ahora tienes que ser polivalente. Yo procuro serlo siempre, pero hoy muchísimo más”, en unos tiempos en los que “igual aprendemos a valorar de otra forma el formato acústico”.
Unos tiempos que, como a todos, también le han alterado los planes. “Tenía pensado girar a partir de la primavera de 2020, como despedida del anterior disco, con la intención de volver a meternos en el estudio a la vuelta”, confiesa el cantante y guitarrista. Pero claro, “la pandemia cortó todo”. Como contrapartida, nació Abrazos furtivos: “una propuesta que sacamos en acústico a partir de entonces”. Esto es, la vuelta a lo básico. “Lo que se pretendía era recuperar la esencia de las canciones y los grupos”.
A Muti eso no parece costarle demasiado, acostumbrado como está a plantear sus producciones a partir de sus versiones primigenias a guitarra y voz. Esa puesta en escena tendrá su prolongación en CERO, lo que no deja de ser también una proyección de la propia experiencia personal en el último año.
A saber, “al final, en mi caso, me vi con una guitarra en un apartamento. Eso también te hace pensar, porque parecía que tenemos que componer todo para grandes conciertos, como banda. Todo esto ha supuesto una reflexión, una manera de mirar lo que estás haciendo con otros ojos”, conviene.
Los conciertos y la ciudad
Muti también percibe un cambio en cómo el público asimila los conciertos ahora. “Antes”, apunta, “los teníamos como punto de encuentro: la música era una excusa para vernos. Hoy la gente que va al concierto va sobre todo porque le interesa la música. Es verdad que pierdes el factor sorpresa, cómo antes descubrías a grupos del cartel que no conocías simplemente por estar ahí. Ahora eso no lo tienes, pero sí que veo que se va, sobre todo, a escuchar”.
En cuanto a la crisis, admite que “para los músicos ha sido mortal”. En este punto, añade que “a valorar está la actividad del Ayuntamiento para mantener la agenda y seguir con las programaciones, eso no ha pasado en todos los sitios”. De su ciudad, Las Palmas de Gran Canaria, agradece haberse criado “cantando boleros y rancheras. Es un punto de encuentro maravilloso para la cultura. La música africana también ha estado presente, es genial lo que tenemos”. Y recuerda, además, que “tenemos un Puerto por el que entraron muchas cosas antes que en el resto de España, como los Beatles o mucha de la música de los sesenta”.
Muti confirma que siempre compone “con una base de Rock”. ¿Está vivo el género? Bueno, “al Rock le llevan matando desde hace muchos años, pero sigue poco a poco encontrando su camino”. “En España”, observa, “se podría mejorar su percepción, y olvidarnos de los clichés. La mezcla nos hace mejor. Y el Rock tiene muchas vertientes”.
El Festival CERO es una producción del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria dirigida por Jeito Canarias y Algato Producciones. En el certamen se ha confirmado la presencia de Ginebras, Flor de Canela, Sound of Aqua y Sanches, además de los acústicos de Said Muti, Dácil Santana y Ant Cosmos. Una vez anunciado el cartel completo, CERO anunciará precios y aforos, esto último en función de la evolución de la situación sanitaria, que también determinará las condiciones de seguridad a adoptar durante su celebración.