Reconocimiento cultural

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Los nombres de Mary Sánchez como el de los Sabandeños y su impulsor Elfidio Alonso, figuran con letra capital en el patrimonio cultural de las islas

Canarias.- Dos figuras emblemáticas de la canción popular canaria han acaparado la actualidad mediática en las últimas semanas. Por un lado, la cantante Mary Sánchez, que con motivo de su 80 aniversario se retirará de la canción con una importante gira de despedida después de más de medio siglo de carrera profesional desde que en los años 50, el compositor Néstor Álamo la instituyera en musa particular de sus populares éxitos.

Mary Sánchez, junto a los Bandama ha recorrido  desde entonces medio mundo dejando bien alto el pabellón de Canarias con su buen hacer. Su presencia escénica, su voz, su forma de encarar las canciones, la han convertido en una artista que ha trascendido varias generaciones. La gira será un brillante colofón a una carrera profesional que ha tenido múltiples reconocimientos, tanto del público –su grabación con el pasodoble “Islas Canarias” llegó a ser disco de oro-, como profesionales e institucionales (entre otros, el de hija predilecta de Las Palmas de Gran Canaria, su ciudad natal, donde además una calle perpetúa su nombre, y medalla de oro de Canarias otorgada por el gobierno autónomo).

Otro de los pilares de la canción canaria, Los Sabandeños, con una trayectoria ya de medio siglo de presencia indiscutible, también en escenarios de las dos orillas, ha visto aumentada su larga lista de distinciones en diferentes países con una prolija lista de distinciones y con el reconocimiento popular de ser recordado su nombre en varias calles de las islas.

Recientemente, la mesa del Parlamento de Canarias ha recordado que impulsaron una "revolución sin precedentes" en la música popular de Canarias, "desde la investigación de sus fuentes originales hasta las variedades y modos de ejecución de agrupaciones, parrandas, músicos y cantantes de las siete islas, porque nacieron con acreditada vocación regional". A este reconocimiento -que se suma al del premio Canarias en Cultura Popular (1997) y medalla de oro dos años antes, así como medalla de oro del cabildo tinerfeño- habría que añadir su candidatura a los próximos premios Princesa de Asturias, inicialmente auspiciada por la formación vallisoletana “Dos Orillas”, muestra elocuente del respeto de compañeros de profesión en otras latitudes.

La proyección de los Sabandeños ha sido importantísima, tanto dentro como fuera de las islas, con una amplísima discografía, en la que es fundamental su antología folklórica en tres volúmenes, o la innovadora Cantata del Mencey Loco, que traspasó fronteras musicales y estilísticas, con una versión rock del grupo United. Su labor de difusión, ha tenido un contrapunto especial en la celebración durante casi treinta años del popular festival sabandeño en la ciudad de La laguna, que les vio nacer en 1966.

Los nombres de Mary Sánchez como el de los Sabandeños y su impulsor Elfidio Alonso, figuran con letra capital en el patrimonio cultural de las islas, sumándose al de tantos otros trabajadores de la cultura, que desde su perspectiva lo han cultivado y enriquecido con el tiempo. Es importante, pues, que las instituciones de las islas reconozcan de manera clara la labor de todos aquellos que han apostado por la cultura, sobre todo en momentos difíciles, consiguiendo que el acervo tradicional no se perdiera, sino que incluso se acrecentara y con ello, se reforzara nuestra identidad cultural.